Frapuchino de frambuesa por favor { DEMIAN GREENWOOD }

Llegue a la cafetería con la carpeta en una mano y el móvil en la otra. La Blackberry se estaba quedando sin batería en mitad de una conversación con mi hermano. Al parecer, una nueva novia le andaba acechando. Pedí un Frapuccino de frambuesa a la camarera sin alzar la vista y lo tome llevándomelo hacia la mesa.

Apoye allí mi carpeta y tome la BB con dos manos, tecleando a toda prisa cuando un pantallazo y aquel sonido irritante me aviso mi teléfono se acababa de apagar. Maldije por lo bajo y la deje de lado, tomando mi baso y la pajita y dándole un sorbo. Saqué de mi carpeta unas fotocopias de partituras y comencé a revisarlas, cambiando algunas notas de la melodía y unas cuantas palabras a la letra.